jueves, 21 de julio de 2011

El sueño del gato que se caía


Tuve un sueño de colores claros, colores de la tierra. Yo estaba trabajando con un ordenador y a través de la ventana  de la habitación vi cómo caía un gato. Era de color canela. Su espalda estaba arqueada y su pelaje erizado. Pensé que tenía miedo. ¡Claro, el pobre estaba cayendo y no sabía qué le iba a pasar!

Me levanté de la silla con mucha tranquilidad, preguntándome “¿De dónde habrá caído este gato?¿Lo habrán empujado?¿De quién será?” “¡Pues sí que es raro que un gato se caiga!”, pensé. Giré sobre mí y el gato estaba tumbado en el suelo. Tenía los ojos cerrados y la cabeza mojada, como sudada. Serían los nervios…

Y sucedió algo interesante. De repente, viví en mi propio sueño dos situaciones que se entremezclaban y a la vez estaban claramente diferenciadas:
  1. Situación A: “Vaya, el gato no ha sobrevivido. Pobre. Puedo cogerlo y llevárselo a su dueño”
  2. Situación B: “Vaya, el gato está débil, pero vivo. Claro, preparó su cuerpo para caer. Puedo cogerlo y llevárselo a su dueño”
En el sueño, me planteé elegir qué quería que sucediera: “¿qué quieres que pase: A o B?” En Coaching, se abren más opciones (C, D…Z…), pero en este sueño no tenía un coach que me acompañase. Estábamos el gato y yo, en cuerpo, emoción y lenguaje.

Esa misma tarde, tuve una breve conversación con mi Maestro de Chi Kung. Antes de comenzar con un nuevo aprendizaje, le comenté lo que había soñado.
  • Él: ¿Qué decidiste?
  • Yo: Me desperté
  • Él: Interesante. En algunas culturas, el gato es símbolo de libertad.
Nada más empezar la clase, vino mi cambio de observador. Sentí qué era decidir desde la libertad y comprendí qué había hecho en el sueño, en mi sueño: experimentar la libertad de decidir qué quiero que ocurra con mi sueño y hacerlo desde la tranquilidad. ¡Podía decidir!, aún mejor, ¡podía decidir desde la serenidad! Y me sentí inmensamente feliz.

Os dejo un trocito de un descubrimiento: 

Samsó, R. El maestro de las Cometas. Ed: Obelisco, 2003.

Esta ha sido mi interpretación onírica. Una interpretación que para mí tiene sentido. Una interpretación desde mi libertad de decidir qué quiero hacer. Y como dice el Maestro de las Cometas, en este mismo momento mi sueño nace, al menos, como una posibilidad. He abierto una puerta y he decidido cruzarla. Gracias Gato.

Reflexiones:

¿Qué hace latir tu corazón y te gustaría gritar al mundo?
¿Qué posibilidades se abren cuando tomas decisiones desde la serenidad? 


Te deseo un día elegante

2 comentarios:

  1. Me ha encantado el sueño, la interpretación y el vínculo con el maestro de las cometas.
    Felicidades por integración de tu libertad de decisión.

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  2. Gracias, Óscar. Llegó en el momento en el que estaba preparada para ver.

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